El higo es un árbol de origen mediterráneo, traído a Venezuela por los españoles en el siglo XVI. Es de copa redondeada, sus hojas son en forma de dedos y gruesas que también se utilizan para dar sabor a las mieles para dulces.
La repostería venezolana es casi totalmente colonial, porque los antiguos venezolanos no conocían el azúcar; preferían los sabores salados. Se obtuvo miel de varios géneros de abejas nativas, pero no tuvieron mayor interés por lo dulce, ya que hubieran domesticado las abejas o desarrollado genéticamente el maíz para la obtención de mieles.
Sin embargo, se empezaron a elaborar dulces durante la colonia aprovechando la producción de caña de azúcar en el país. A su vez, se incorporaron y utilizaron productos venezolanos para la preparación de postres, tales como la harina de maíz para sustituir la harina de trigo y la inclusión de variedad de frutas de temporada.
Pero, hablando del dulce de higo, existen diferentes recetas para satisfacer los diversos gustos y son infinitas las preparaciones para elaborarlo, para lo que se utiliza azúcar o panela para endulzar. Se incorporan a su vez, distintas especias para perfumar como: canela, anís, pimienta gorda, clavo de olor, naranja o vainilla entre otros.
Si se prepara con azúcar, una receta sencilla es calcular el mismo peso de los higos para agregar el mismo peso en azúcar a la miel.
Preparación:
Haga una incisión o corte en forma de cruz en la base del higo. Ponga los higos en un recipiente con agua que los cubra y déjelos durante un día. Cuele los higos y póngalos en una olla y agregue 8 tazas de agua. Añada la pizca de bicarbonato y haga hervir el agua con los higos, cocínelos durante 15 a 20 minutos o hasta que suavicen.
Deje los higos en el agua en el que se cocinaron durante otro día entero.Al día siguiente cierna el agua y escurra cada higo hasta sacarle la mayor cantidad de agua. Procure hacerlo suavemente para no deshacerlos. Ponga la panela o papelón y las especias en una olla lo suficientemente grande para que no queden amontonados. Añada 6 tazas de agua y cocínela a fuego lento hasta que la panela o papelón este completamente disuelta y se empiece a convertir en miel.
Añada los higos y siga cocinando a fuego lento hasta que la miel esté espesa, aproximadamente unas 2 a 3 horas. Una vez que enfríen, sirva los higos. Si prefiere coloque un poco de queso crema o simplemente queso blanco para experimentar un delicioso contraste de sabores.