La revolución de las redes sociales, ha hecho posible que los eventos deportivos sean cada vez más seguidos, sin importar la localidad en la que se realicen. Entonces, cuando unimos esa penetración, con la ya fama adquirida previamente por el deporte, nos encontramos con unos interesantes datos, como los que nos aporta el Super Bowl, un evento deportivo que literalmente hace que, durante casi cuatro horas, se detenga más de la mitad de los Estados Unidos, hazaña que no realiza ni el Mundial de fútbol, ni las Olimpíadas, ni mucho menos el béisbol.
Por ejemplo, ¿Sabía usted que el domingo en el que se realiza el Super Bowl, es el segundo día del año con mayor consumo de comida en los Estados Unidos? Pues sí, el primero es el día de Acción de Gracias, a diferencia que en esta oportunidad la comida favorita son es la comida rápida, por lo que recientemente se supo, que sólo una reconocida cadena de pizzas a domicilio, despacha este día más de 11 millones de unidades y se consumen una cantidad similar de toneladas de papas fritas.
Además de esto, el Super Bowl es el evento deportivo más costoso para realizar publicidad, siendo el costo base de un spot publicitario de 20 segundos 4 millones de dólares. Sí, usted leyó bien, 4 millones de dólares por sólo 20 segundos de pantalla.
Y si eso le parece algo fuera de este mundo, las estadísticas y los hechos muestran que 20% de los estadounidenses se han perdido bodas de un amigo o familiar, hasta el funeral de un ser querido o el nacimiento de un hijo, sólo para asistir a un partido del Super Bowl, que además es el cuarto evento deportivo televisado más visto en el mundo.
Por último, seguramente usted se imagina que siendo uno de los espectáculos más vistos en todo el Planeta, los artistas que se presentan en el intermedio, cobran una millonada por la presentación, y lo cierto es que la mayoría de ellos, tal como lo hizo Kate Parry este año, lo hace gratis, a pesar de que la organización dispone de un poco más de medio millón de dólares para tal fin.